III
Quedarme con ayer donde fuimos más que piel contra piel
Cuando fuimos huesos y fuimos sueños
Cuando fuimos corazón y fuimos miedo
Cuando fuimos un vacilar
Cuando ambos pudimos al fin respirar
Cuando me descargué el “¿Qué pasará?”
Cuando me cansé de pensar y de desearte
Cuando me dejé de lado y silencié al miedo
Y quedarme con tu calor a mi lado
Quedarme con tu nerviosismo y también con el mío
Quedarme co tu nariz en la raíz de mi cabello
Quedarme con tu cara entre mi cuello
Quedarme con ese momento idílico, con esa belleza de
solsticio
Quedarme con tus labios contra mi piel, con la sensación de
tu áspera barbilla
Encerrarme ahí donde me comía el nervio, donde se cumplía un
sueño
Justo ahí donde nos hizo falta un “te quiero”
Quedarme con tus ojos suplicantes, anhelantes
Quedarme ahí donde se durmió nuestra suerte un instante
Quedarme ahí donde explotaron mil estrellas brillantes
En ese pasado que no se ha ido
En ese futuro que jamás ha venido.
No hay comentarios:
Publicar un comentario